OpiniónPortadaSinaloa

PRI Sinaloa en ruinas: César Emiliano Gerardo no logra frenar la caída

Culiacán, Sin, 19 de junio del 2025.- Mientras Sinaloa enfrenta una crisis de seguridad, económica y política sin precedentes, la dirigencia estatal del PRI encabezada por César Emiliano Gerardo parece más concentrada en dar conferencias de prensa que en reconstruir un partido en ruinas. La falta de liderazgo, la desconexión con la realidad y la incapacidad para aglutinar a una militancia cada vez más dispersa, evidencian un PRI debilitado que hoy sobrevive más por inercia que por fuerza política real.

En un nuevo intento por posicionarse como oposición, el dirigente estatal del PRI, César Emiliano Gerardo, encabezó una conferencia de prensa junto a legisladores y liderazgos tricolores para denunciar la violencia y el colapso económico en el estado. Sin embargo, lo que debió ser una muestra de fuerza terminó exhibiendo las fracturas internas y el vacío de conducción política que padece el priismo en Sinaloa.

A pesar del dramatismo de las cifras expuestas —más de 1,500 homicidios, 25 mil empleos perdidos, mil empresas cerradas, 97 niños desaparecidos— la presencia de Gerardo fue irrelevante en lo sustantivo. Sin discurso propio, sin propuestas concretas, su participación se limitó a repetir argumentos del comité nacional y a respaldar la impugnación de los comicios recientes, en un tono más testimonial que estratégico.

Mientras la senadora Paloma Sánchez asumió la vocería crítica con cifras y señalamientos duros al gobierno estatal, el presidente del PRI en Sinaloa sigue mostrando que su liderazgo no genera cohesión ni proyección. La militancia lo resiente, y sectores del partido lo ven más como una figura puesta a modo por el centro que como un referente local con capacidad real de convocatoria.

En los hechos, César Emiliano Gerardo ha dejado pasar momentos clave para reposicionar al PRI. En los procesos internos, su falta de autoridad fue notoria. En el ámbito público, sus intervenciones se limitan a ruedas de prensa sin eco. Ni siquiera ante la peor crisis institucional del estado ha logrado articular una oposición sólida o establecer puentes con otros sectores sociales.

“No hay partido, hay conferencias”, dijo un exdiputado local priista que no acudió al evento, al ser consultado por este medio. Y es que el PRI sinaloense, bajo su actual dirección, parece haberse resignado a un papel decorativo: alza la voz, sí, pero no organiza; denuncia, pero no articula; habla de democracia, pero no conecta con la base.

En la conferencia se denunciaron irregularidades electorales —casillas infladas, uso de programas sociales, manipulación del voto— pero la denuncia careció de la fuerza moral y política que un PRI activo y con credibilidad podría haber generado. La realidad es que hoy el priismo sinaloense carece de rumbo, sin cuadros visibles, sin una narrativa que lo distinga de lo que tanto critica.

Sinaloa arde y el PRI se deshace en sus propias cenizas. Mientras la ciudadanía exige respuestas y liderazgo real, el priismo sinaloense se consume en discursos estériles y liderazgos que no cuajan. Y al frente, César Emiliano Gerardo sigue solo, hablando ante un micrófono, en un partido que ya no lo escucha.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba